Este miércoles se cumplió un año desde el inicio del conflicto armado en Etiopía, que todavía está lejos de una solución. Los enfrentamientos entre las fuerzas de la región de Tigray y los militares gubernamentales se intensificaron esta semana, mientras los rebeldes avanzan hacia la capital del país y el conflicto amenaza con convertirse en una guerra aún mayor.
Estado de emergencia
El Consejo de Ministros de Etiopía declaró este martes el estado de emergencia en todo el país por 6 meses, ante la amenaza de los rebeldes de lanzar una ofensiva contra la capital.
El documento prohíbe la difusión de cualquier tipo de discurso que contradiga al oficial y prevé la persecución de los que presten ayuda financiera o moral a los grupos rebeldes. Asimismo, se prohíbe organizar manifestaciones y portar armas sin permiso, así como circular por las zonas urbanas sin documentos o interrumpir procesos de producción importantes.