Tras las nuevas restricciones horarias que limitan el funcionamiento de bares entre la 1 y las 6 de la madrugada, desde el gobierno bonaerense adelantaron que podrían acotar aún más las actividades si los nuevos casos de coronavirus continúan en aumento. El fin de semana entre Mar del Plata y Pinamar la policía clausuró más de 50 fiestas clandestinas.
El fenómeno está lejos de ser exclusivo de la Costa Atlántica sino que se extiende a todos los centros turísticos. En las localidades cordobesas de Carlos Paz o Calamuchita también hubo fiestas clausuradas y circularon imágenes de cientos de personas amuchadas a la ver a del río.
“Siguen aumentando los casos y todos nuestros indicadores predictivos muestran que, si no tomamos medidas, van a seguir aumentando”, aseguró Carlos Bianco. El jefe de gabinete bonaerense explicó que “si siguen los casos en aumento, implicará” que el gobierno tome “medidas más restrictivas”.
Alberto Fernández y Axel Kicillof intentaron imponer restricciones más fuertes, pero se toparon con el rechazo de los gobernadores y de los intendentes que no quisieron saber nada con la idea de acotar las actividades en medio de la temporada de verano.
Es por eso que el presidente terminó dejando a juicio de cada distrito las medidas y que la Provincia adoptó un esquema similar a la de la Ciudad, con cierre de bares entre la 1 y las seis de la madrugada.
La intención fue permitir que continuaran funcionado los locales gastronómicos y frenar las reuniones en bares, aunque hasta ahora no hubo soluciones para evitar las juntadas multitudinarias en los balnearios. De hecho este domingo Playa Grande, una de las más concurridas en Mar del Plata, tuvo que limitar la entrada de personas para no sobrepasar el aforo y permitir que haya distancia social entre los concurrentes.
En el último parte que dio a conocer Nación, la Provincia tiene casi 3300 contagios un número altísimo para un día de fin de semana. Es por ello que Bianco adelantó que será difícil que esta semana los contagios bajen de los 4000 casos en promedio.
“El tiempo que pasa la gente en terapia intensiva respecto de la primera ola es bastante menor”, destacó el jefe de gabinete en una entrevista con Radio Rivadavia.