Así lo indica un relevamiento del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda.
Un informe del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV) contrasta lo devengado en concepto de intereses de las letras del Banco Central con partidas presupuestarias del gobierno de Mauricio Macri. Las Leliq se convirtieron en una de las palabras clave de la previa de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias despues de que el precandidato a presidente por el Frente de Todos, Alberto Fernández, anunciara que aumentará los sueldos y las jubilaciones un 20%.
“Lo devengado en concepto de intereses de las letras del Banco Central en junio del 2019 representó unos $52 mil millones. Tal cifra contrasta con partidas tales como la de ciencia y tecnología en la cual de cada $ 100 gastados en Leliqs apenas $6,30 fueron gastados en dicha partida. En el mismo sentido, la inversión en agua potable y alcantarillado ha representado apenas un 2,9% del monto abonado por las letras”, explica el documento titulado “Deuda de corto plazo”.
Por las Leliq, ya se pagaron intereses por casi $432.000 millones para los bancos. Los intereses pagados por mes de Leliqs equivalen a 4,2 millones de salarios mínimos, 4,5 millones de jubilaciones mínimas y 20 millones de AUH.
En junio por cada $100 pagados de intereses de Leliqs, se tiene un presupuesto de $ 6,30 para Ciencia y Técnica, de $2,90 para agua y alcantarillado, de $0,40 para Cobertura Universal de la Salud (CUS – Medicamentos), de $ 1,90 para políticas alimentarias, de $ 1,00 para la industria y de $ 3,40 para vivienda y desarrollo urbano, entre otros.
Además, con dichos pagos se pudiesen haber financiado, 457 becarios de investigación, 5 mil kilómetros de rutas, 33 mil viviendas, 70 millones de prestaciones alimentarias con tarjeta, 6 millones de cooperativistas con ingresos de inclusión social y 386 millones de tratamientos distribuidos (CUS)
“El aumento en el stock de leliqs no sólo afecta la actividad económica por la altísima tasa de interés que recibe todo el sistema financiero sino que son fondos que no están siendo aplicados a la actividad productiva y al empleo sino a la especulación y al margen financiero de los bancos”, concluyen desde la UNDAV.
