El gobierno de Axel Kicillof hará en las próximas semanas el llamado a licitación de las máquinas tragamonedas de siete salas de juego, en las que exigirá mejoras en las instalaciones de los casinos.
Se trata de licitaciones que estaban pendientes y que involucran a los casinos Hermitage y Sasso (en Mar del Plata), Miramar, Necochea, Mar de Ajó, Tandil y Sierra de la Ventana, concesiones que venían siendo prorrogadas anualmente.
En Necochea, la licitación dará previsibilidad de continuidad a una sala que estuvo tres años sin funcionar tras el anuncio de cierre que había hecho la gestión de María Eugenia Vidal. En los últimos tiempos se reactivó pero solo funcionaba con paño.
Ahora, el llamado a licitación para las tragamonedas en ese casino reactivó la intención del municipio de vender el icónico edificio ubicado frente al mar, que fue inaugurado en 1973 y que, hoy, presenta un fuerte deterioro.
Se trata de un proceso que corre aparte del llamado a licitación provincial. El pliego para la venta del casino ya fue aprobado por el Concejo Deliberante local hace dos años, cuando estuvo a punto de concretarse la compra por parte de Casino Victoria, de Daniel Mautone.
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Cerca del municipio administrado por el vecinalista Arturo Rojas señalaron a LPO que, en aquel momento, la venta se cayó porque la empresa habría condicionado uno de los pagos, algo que el pliego no contemplaba. Pero, ahora, aseguran que sigue en pie el interés de Mautone.
Para la comuna, resulta cada vez más complicado el mantenimiento del complejo de cuatro manzanas, donde, además de la sala de juegos, hay algunas oficinas cedidas a la Policía Bonaerense. “Hay varios sectores que están en desuso pero siguen generando gastos”, dicen.
En cuando al llamado a licitación que prepara la Provincia para los slots de siete casinos, la confirmación la hizo el viernes pasado a los gremios del sector el titular de Lotería y Casinos, Gonzalo Atanasof.
Además de la operación de las máquinas tragamonedas, el pliego implica una serie de refacciones a los edificios y mejoras en las condiciones laborales de los empleados.
Son licitaciones que estaban pendientes por diversos motivos. En el caso de los casinos Hermitage, Miramar y Tandil, los tres fueron licitados durante la gestión Vidal en un mismo bloque que finalmente se declaró desierto y no se volvió a licitar.
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En el caso de Mar de Ajó y Necochea, ambas salas no fueron parte del proceso de licitaciones a 20 años que hizo Vidal porque la entonces gobernadora había anunciado que las cerraba.
En cuanto a Sierra de la Ventana, tiene vencido el contratos hace dos años, mientras que el Sasso vence este año.
Según pudo saber LPO, no se esperan demasiados cambios en los manejos de los casinos. Por el momento, voces del sector solo se ven una competencia fuerte por el casino de Tandil, donde actualmente opera Boldt.
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