Un estudio llevado acabo recientemente en EE.UU. ha revelado que algunos ciudadanos de ese país optan por el uso de antibióticos para peces con el fin de curar enfermedades humanas.
La razón principal de este fenómeno es ahorrar dinero en medicamentos y visitas al médico en un país donde no hay sanidad pública universal. Los expertos advierten que esta práctica, además de ser peligrosa, puede llevar a que las muertes causadas por problemas de resistencia microbiana superen a la mortalidad por cáncer.
RT ha conversado con algunos ciudadanos del país norteamericano que forman parte de esta tendencia para conocer sus historias.
Medicamentos para animales
Uno de ellos es Christopher Payne, un vecino de Robersonville, Carolina del Norte, quien consume antibióticos para peces desde hace cuatro años.
“No tengo seguro, así que solo ir al médico me cuesta 120 dólares la visita, y además, ya gasto 77 dólares en mis medicamentos, y solo eso porque una gran cadena de supermercados tiene descuentos en las prescripciones”, cuenta Payne.
Y añade: “Si tuviera que gastar otros 150 dólares en cada tarro de antibióticos, realmente podría arruinar mi mes”
El de Payne no es un caso aislado. Tras estudiar más de 2.000 comentarios ‘online’ sobre esos productos, diversos científicos concluyeron que se trata de una práctica extendida en Estados Unidos.