Alberto Fernández se reunió este miércoles con los gobernadores y avanzaron fuerte con la idea de aplicar un “toque de queda sanitario”, que impediría la circulación durante la madrugada en todo el país.
Radio 90 adelantó ayer que el presidente tenía previsto definir sobre el final de la semana si aplica el toque de queda nocturno, algo que todo indica podría comenzar a regir desde este viernes o el próximo lunes.
En la reunión virtual de este mediodía, Alberto habría recibido el apoyo de los mandatarios provinciales para aplicar la medida, que sería presentada como una restricción de la circulación entre las 23 y las 6 de la mañana, aunque también se maneja la posibilidad que sea de 0 a 6. También se analizó que cada gobernador defina el horario.
Los números de coronavirus de este martes, con casi 14 mil nuevos contagios, aceleraron los plazos del Gobierno, que no tiene margen para volver a una cuarentena dura y busca medidas intermedias.
La principal idea es el toque de queda nocturno (aplicado ya en algunas provincias) con lo que buscan impedir las fiestas clandestinas y reuniones sociales, algo que de todos modos actualmente está prohibido pero igual sucede.
Otras medidas que se analizan son restringir los permisos para el transporte público (que volvería a ser exclusivo para esenciales) y acotar a 10 el número de personas en reuniones. También se habló de acotar los viajes al exterior y exigir hisopados a todos los que viajen en vuelos de cabotaje.
Como reveló Radio 90, fuentes del sistema aeroportuario aseguran que persiste la idea de un cierre del aeropuerto de Ezeiza el próximo 15 de enero para vuelos al exterior.
En el gobierno dicen que con los gobernadores coincidieron en la necesidad no tomar medidas que impliquen frenar la economía ni cancelar la temporada en lugares turísticos.